Pues Nomás...
Ensimismado, abrumado, faltante de rima y absurdo en el relato; busco una secuela, un retrato, que de nombre y exponga constante, que este verso vacilante es excusa del caminante para escribir a prisa la canción; el texto de la brisa.
Pretexto vago y saliente a tiza, no hay motivo, no hay malicia, es la noche, el cansancio y la tinta. Es la necesidad, es la premisa, de buscar, de infringir en la risa y calmar la comezón, transmitiendo en caricia; que no hoy ansia consumada, no hay razón de acudir a la milicia. Buscar nos encuentra e intentar nos dirige, que aunque no hay tema que rige, este texto, motor, bizbirige, encontró en ti lector una voz, un cuerpo de expresión, pues en esta ocasión: el texto a ti te elige y tu le das razón...
ANDRÉS MESA Z.